La silla del 3 de mayo

Es inútil buscarlo entre tanta gente, porque jamás lo encontraré, pero tengo la esperanza de volverle a ver,

Ya han pasado tantos años que cuando te vea no te reconoceré entre tanta gente, he conocido tanta gente, pero ninguna tiene esos ojos, ni tu mirada...

De vez en vez clavas un suspiro y me pregunto si lo que hago te interesa o es solo un pretexto vano para acercarte y decirte que te quiero, viendo tu sonrisa.
Tu voz la conciliaría en mis sueños si la tuviera, pero ahora no tengo quieto el corazón intentándote buscar entre mil años sentada en la misma silla de siempre te espero y tú ni me recuerdas.
¿Sabéis por que me desespero? porque falta mucho para estar con vos, no sé si en el infierno o en el paraíso, pero será en algún lugar de este universo...
El cielo es el único que me consuela en mis noches de dolor, un sueño roto y un alma perdida , no es objetiva la noche caída en el vacío de tu amor, lo firma la estrella vivida que alumbrara todos mis días.
Me enseñaste a vivir la vida de otra manera a tocar el cielo con tu amor, los brazos que me brindaste fueron diferentes que para abrazar el adiós, mi olfato solo sirve para oler las horas que se están marchitado.

Pero yo aquí seguiré en la misma silla donde siempre te espero cada 30 de octubre y en esa banca fría cada 3 de mayo.


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